Publicado en Animal Político.
En el último trimestre del año la economía mexicana decreció (-)0.4% anual. Si se evalúa el crecimiento de la economía en todo 2019 se observó una tasa de (-)0.1%, la primera tasa negativa de crecimiento para un año desde 2009.
De acuerdo con el Inegi, de forma trimestral, el PIB decreció (-)0.1% en el cuarto trimestre e hiló cuatro periodos consecutivos con caídas trimestrales.
La estimación oportuna publicada el 30 de enero de 2020 mostraba una tasa anual de (-)0.3%. Sin embargo, con el dato oficial se observa una ligera corrección a la baja ya que en el 4° trimestre de 2019 la tasa definitiva fue (-)0.4%.
Dado que la meta de crecimiento económico establecida por México, ¿cómo vamos? es de 4.5% anual, el #SemáforoEconómico se encuentra en rojo.
“En este año será fundamental que se implementen políticas orientadas a promover un ambiente de confianza y certidumbre para lograr atraer inversiones, tanto nacionales como extranjeras, que generen empleos y que impulsen la actividad económica del país”, señaló México, ¿cómo vamos?
La tasa de crecimiento anual en el último trimestre del año pasado fue la más baja desde el cuarto trimestre de 2009, cuando la economía se contrajo (-)1.8% anual.
También se observó que fue la segunda tasa anual consecutiva con una cifra negativa, pues en el 3º trimestre de 2019 la economía cayó (-)0.2%. De esta forma, la tasa de crecimiento observada en todo 2019 fue de (-)0.1%, registrando por primera vez una tasa de crecimiento anual negativa para un año completo desde 2009, cuando la economía mexicana se contrajo en (-)5%.
Al interior del PIB, en 2019 fueron las actividades primarias las que tuvieron el mejor desempeño económico, reportando un crecimiento de 2.0% respecto a 2018. Estas actividades se componen por la agricultura, la ganadería y la pesca, las cuales aportan alrededor de 3% del PIB total del país, y llevan 8 años creciendo a tasas positivas.
En 2018, su tasa de crecimiento fue de 2.4% anual. Por otro lado, las actividades secundarias fueron las que peor desempeño reflejaron en 2019, con una tasa de crecimiento de (-)1.8% en el año, primera tasa negativa para un año desde 2017, cuando decrecieron (-)0.04%. La tasa de crecimiento del sector secundario en 2019 es la más baja desde 2009, cuando cayeron (-)7.3% respecto al año anterior. Las actividades secundarias incorporan actividades de manufactura, construcción, minería y generación eléctrica, y aportan alrededor de una tercera parte de la actividad económica del país.
Por último, las actividades terciarias, que aportan más del 60% del PIB de México, reportaron una tasa de crecimiento de 0.5% en todo el año, tasa más baja para este sector desde 2009, cuando decreció (-)3.9% respecto a 2008.
El sector terciario es el que acumula la mayor parte de la actividad económica nacional y se compone por el sector servicios, que incluye sectores como el comercio al por menor y al por mayor, la información en medios masivos, los servicios financieros, entre otros.
Los resultados de crecimiento económico en 2019 reflejan el desempeño económico de las distintas áreas productivas del país. Sí se analizan los 20 sectores que componen la economía mexicana, los que reportaron un menor crecimiento económico en 2019 fueron la minería, la construcción, los corporativos y el comercio al por mayor. Los primeros 2 sectores antes mencionados pertenecen a las actividades secundarias, lo cual explica su desempeño económico en el año.
En específico, la minería se contrajo (-)5.1% en 2019, la construcción cayó (-)5.0%, los corporativos (-)3.6% y el comercio al por mayor disminuyó (-)3.1% el año pasado. Estos 4 sectores, que registraron un menor crecimiento económico en 2019, aportan en conjunto 20% de la actividad económica de México.
En total, de los 20 sectores económicos, 8 tuvieron tasas de crecimiento negativas en 2019, incluyendo los servicios educativos y los servicios financieros y de seguros.
Los sectores económicos que más crecieron durante el año pasado fueron los servicios de apoyo a negocios y manejo de desechos, el comercio al por menor, la generación de energía eléctrica y la agricultura, ganadería y pesca.
Los servicios de apoyo a los negocios y manejo de desechos, que representan 4% de la actividad económica nacional, incrementaron 4.9% en el año.
El comercio al por menor aumentó 2.7% anual, la energía eléctrica creció 2.3% y la agricultura, ganadería y pesca registró una tasa anual de 2% en 2019. En total, los 4 sectores que más crecieron en 2019 representan el 18% de la actividad económica del país.
Para entender mejor el bajo crecimiento de la economía en 2019, es importante evaluar el desempeño de los sectores con mayor peso en el PIB nacional. Las industrias manufactureras, los servicios inmobiliarios, el comercio al por menor, el comercio al por mayor y la construcción, en conjunto aportan más de la mitad de la actividad económica del país, 51%.
De los 5 sectores principales del país, 2 registraron tasas negativas de crecimiento en 2019, y ninguno creció por encima del 3% anual. En particular, la construcción tuvo la tasa más baja, de (-) 5.0%, mientras que la tasa más alta fue la del comercio al por menor, que incrementó 2.7% en el año.
Para lograr impulsar el crecimiento económico en 2020, se debe fortalecer la inversión. Diversas organizaciones han señalado la debilidad de la inversión en los últimos periodos como una de las principales causas para la desaceleración económica de México. Las estimaciones más recientes de crecimiento económico para este año se encuentran alrededor de 1%.
El Banco Mundial, por ejemplo, pronostica un crecimiento de 1.2% en el año, mientras que el Fondo Monetario Internacional estima una tasa de 1.0%.
Hay otras organizaciones que tienen pronósticos más bajos, como el banco de inversión Barclays, que calcula que la economía mexicana crecerá 0.6% en el 2020. Después de lo observado en 2019, un elemento fundamental para lograr una mayor tasa de crecimiento en 2020 es la inversión.
Pues, al tercer trimestre de 2019, la inversión representó apenas 20.9% del PIB, y en el 2º trimestre de 2019 el 20.6%, nivel más bajo desde el 2º trimestre de 2014. Además, en los primeros 3 trimestres del año pasado, la inversión privada disminuyó (-) 4.0% en promedio anual, mientras que la inversión pública se contrajo a una tasa promedio de (-)10.8% en el mismo periodo.